El tratamiento no quirúrgico es uno de los más utilizados para el cáncer de próstata, este método es utilizado en pacientes con afecciones cardiacas y de coagulación. Por ser un procedimiento mínimamente invasivo no se requiere anestesia general por lo que la estadía del paciente es mínima, es decir ambulatoria.
A diferencia del tratamiento no quirúrgico, se utilizan técnicas mas sencillas y en los métodos quirúrgicos se emplean técnicas invasivas y comprometen la vida del paciente al intervenirse bajo anestesia general y tratar su pos operatorio intrahospitalariamente.
Según el avance tecnológico se pueden clasificar las técnicas así:
Técnica Hifu: cuya característica principal es la utilización de ultrasonidos para destruir las células cancerosas.
Utilización del endoscopio: se utiliza el fibrioscopio para esta técnica, que es un aparato que sirve para visualizar y detectar tejido anormal en el aparato reproductor, y si es necesario tomar alguna muestra para un estudio ( biopsia), esta técnica es mínimamente invasiva y riesgosa.
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